Today I walk home like every day, but today the rain is with me, that smell of wet soil, those cold drops make all the passers-by faithful to a primitive instinct are gathered in the few spaces that offer shelter of water, I, in Change, I enjoy the rain, every drop evokes a memory, a sensation, an aroma, a skin bristling … At home I run to the shower, some hot water to regulate the temperature, but the sensations are still intact, I lie in The bed, the cold that sneaks through the window and the bones, -the memories come back and with them an erection-, I remember how your body moves in front of me while you masturbate to satisfy my voyeurism, your skin bristling, your vagina Overflowing with every rush of your fingers, a rapturous heat runs through my body from the mouth of my stomach and radiates like waves, my body contorts, my veins swell, my balls are collected, as if they explode and they want to happen: Instant where the orgasm And ejaculation come together to make me delirious with pleasure …
Minutes later the effusiveness of this ephemeral pleasure dissipates as if it were a smoke from a candle …
Cotidianidad (Sed non satiata) 1/37
Hoy camino a casa como todos los días, pero hoy la lluvia me acompaña, ese olor a tierra mojada, esas gélidas gotas hacen que todos los transeúntes fieles a un instinto primitivo se juntan en los pocos espacios que ofrecen cobijo del agua, yo, en cambio, disfruto de la lluvia, cada gota evoca un recuerdo, un sensación, un aroma, un piel erizada… Ya en casa corro a la ducha, un poco de agua caliente para regular la temperatura, pero las sensaciones siguen intactas, me tumbo en la cama, el frio que se cuela por la ventana y los hueso, -vuelven los recuerdos y con ellos una erección-, recuerdo como se mueve tu cuerpo frente a mi mientras te masturbas para satisfacer mi voyerismo, tu piel erizada, tu vagina se desbordan con cada arremetida de tus dedos, un arrebatador calor recorre mi cuerpo desde la boca de mi estomago y se irradia como las ondas, mi cuerpo se contorsiona, mis venas se hinchan, mis bolas se recogen, como si estallar quisieran y ocurre: el instante donde el orgasmo y la eyaculación se juntan para hacerme delirar de placer…
Minutos después la efusividad de este placer efímero se disipa como si del humo de una vela se tratase…
